Querido Director:
Todo es armonía y buenas vibraciones. El Celta enganchó una racha de buenos resultados y está encaramado en lo alta de la tabla y con las mismas posibilidades que los demás para conseguir el ascenso. Menos mal que el “gurú” de turno no consiguió cesar al “pelotas” del entrenador, cuando se dieron los resultados negativos al principio de temporada. Murcia lo está haciendo bien, pero no por ello deja de ser un “pelotas” con el Presidente. Hombre, no suena bien aquello de que “el Presidente tiene como virtudes la paciencia y la bondad”. Pelotas...pelotas, Murcia.
Tomando un café con personas que dicen entender de fútbol, escuché un comentario que me pareció muy interesante. Decía uno de los tertulianos que en el fútbol , cuando hay buenos resultados, los aficionados nada más que hablan de fútbol y dan sus opiniones, con más o menos vehemencia, sobre si el entrenador tarda en realizar los cambios, si debe jugar Trashorras, si Borja Oubiña y Rosada son compatibles, etc.. En definitiva, según el buen hombre, se olvidan de los asuntos económicos y todas aquellas otras zarandajas que no estén relacionadas con lo que es puramente fútbol.
No obstante uno de los “cafeteros”, lo digo porque estaba tomado café, sacó al ruedo, la noticia de que el Celta y Caixanova habían llegado a un acuerdo y por tanto el procedimiento concursal iba por buen camino, quedando pendiente la negociación con Hacienda y el Ayuntamiento.
Haciendo un alarde de tener muchos y ciertos conocimientos sobre el tema del acuerdo Celta-Caixanova, comenzó con una frase que a su entender resumía lo ocurrido.
Según él “para este viaje, no hacían falta estas alforjas”. Es decir, el tan cacareado acuerdo era posible sin haber llegado al planteamiento concursal.
Como un coro, inmediatamente, los otros asistentes al café le preguntaron sobre qué quería decir con tal afirmación.
Con toda la tranquilidad, comenzó a razonar sus conocimientos. Según su saber y entender, Carlos Mouriño Atanes llegó a un acuerdo con Caixanova para aplazar la deuda del Celta, incluída la que tiene él, personalmente avalada, garantizando el mismo Carlos Mouriño Atanes la nueva situación.
El informado resalta que, al parecer, no habría condonación alguna de deuda, manteniéndose la totalidad de la misma.
Es decir, se aplaza el total de la deuda y Carlos Mouriño avala. La duda, para el comentarista de la situación, es si Caixanova fue muy exigente con los avales.
Después de la explicaciones dadas, el hombre se ratifica en su dicho: “para este viaje …no hacen falta alforjas” .
Pues va a tener razón, Sr. Director.
El más callado de los asistentes, preguntó: ¿entonces por qué Mouriño montó el “carajal” de la Ley Concursal?.
Otro, no menos callado, le contestó: Porque el odio venció a la razón.
Sr. Director, después de esta frase no hizo más comentarios, acabándose la tertulia.
Sr. Director, ¿será verdad todo esto?. Por las alturas se hacen pactos y contubernios que los mortales no llegamos a alcanzar. Sólo los podemos intuir. Pues a intuir toca.
Saludos.
Manuel Galocha 19-1-2209
Todo es armonía y buenas vibraciones. El Celta enganchó una racha de buenos resultados y está encaramado en lo alta de la tabla y con las mismas posibilidades que los demás para conseguir el ascenso. Menos mal que el “gurú” de turno no consiguió cesar al “pelotas” del entrenador, cuando se dieron los resultados negativos al principio de temporada. Murcia lo está haciendo bien, pero no por ello deja de ser un “pelotas” con el Presidente. Hombre, no suena bien aquello de que “el Presidente tiene como virtudes la paciencia y la bondad”. Pelotas...pelotas, Murcia.
Tomando un café con personas que dicen entender de fútbol, escuché un comentario que me pareció muy interesante. Decía uno de los tertulianos que en el fútbol , cuando hay buenos resultados, los aficionados nada más que hablan de fútbol y dan sus opiniones, con más o menos vehemencia, sobre si el entrenador tarda en realizar los cambios, si debe jugar Trashorras, si Borja Oubiña y Rosada son compatibles, etc.. En definitiva, según el buen hombre, se olvidan de los asuntos económicos y todas aquellas otras zarandajas que no estén relacionadas con lo que es puramente fútbol.
No obstante uno de los “cafeteros”, lo digo porque estaba tomado café, sacó al ruedo, la noticia de que el Celta y Caixanova habían llegado a un acuerdo y por tanto el procedimiento concursal iba por buen camino, quedando pendiente la negociación con Hacienda y el Ayuntamiento.
Haciendo un alarde de tener muchos y ciertos conocimientos sobre el tema del acuerdo Celta-Caixanova, comenzó con una frase que a su entender resumía lo ocurrido.
Según él “para este viaje, no hacían falta estas alforjas”. Es decir, el tan cacareado acuerdo era posible sin haber llegado al planteamiento concursal.
Como un coro, inmediatamente, los otros asistentes al café le preguntaron sobre qué quería decir con tal afirmación.
Con toda la tranquilidad, comenzó a razonar sus conocimientos. Según su saber y entender, Carlos Mouriño Atanes llegó a un acuerdo con Caixanova para aplazar la deuda del Celta, incluída la que tiene él, personalmente avalada, garantizando el mismo Carlos Mouriño Atanes la nueva situación.
El informado resalta que, al parecer, no habría condonación alguna de deuda, manteniéndose la totalidad de la misma.
Es decir, se aplaza el total de la deuda y Carlos Mouriño avala. La duda, para el comentarista de la situación, es si Caixanova fue muy exigente con los avales.
Después de la explicaciones dadas, el hombre se ratifica en su dicho: “para este viaje …no hacen falta alforjas” .
Pues va a tener razón, Sr. Director.
El más callado de los asistentes, preguntó: ¿entonces por qué Mouriño montó el “carajal” de la Ley Concursal?.
Otro, no menos callado, le contestó: Porque el odio venció a la razón.
Sr. Director, después de esta frase no hizo más comentarios, acabándose la tertulia.
Sr. Director, ¿será verdad todo esto?. Por las alturas se hacen pactos y contubernios que los mortales no llegamos a alcanzar. Sólo los podemos intuir. Pues a intuir toca.
Saludos.
Manuel Galocha 19-1-2209
