GIJON (MORRAZO-tribuna) .- Matinal soleada en los campos de El Mareo, afcionados gallegos desplazados desde la madrugada en viaje de 5 horas y ambientillo cordial en la grada. Un Pontevedra que llegó al descanso ya con ventaja de un gol en el marcador. Luego, en la segunda parte, Charles y Moré tuvieron dos oportunidades de oro para sentenciar el partido en la media hora inicial de este tramo complementario.Es decir, que el Pontevedra, gracias a no ser capaz de sentenciar, optó por sufrir ante el empuje de los Acebal, Prendes y compañía. Es tal vez lo que le falta a este cuadro granate para acabar rompiendo en el campeonato : ese punch, ese rouge final del que sigue carente.
Consciente del empuje de los locales, Gay optó por meter a Bermudo hacia el 25 minuto del tramo final de partido; el Pontevedra buscó como agua de mayo sostener la ventaja. Por contra, a los 32 minutos, Abelardo optó por impulsar los cambios y meter a Javi López, otro tipo alto, para intentar el empate... Llegan los nervios para los granates : hasta el mal bote le juega una mala pasada a Jorge Rodriguez que corrige el mismo. Busca oxigenar el centro del campo Gay, mete a Danilson por Nené, que empezó bien el partido pero estaba ahogado ya...
Atrás aguantaba el Pontevedra, merced también al enorme oficio de Vázquez y Turiel -gran partido el suyo-. La proyección hacia el ataque era complicada en la salida por bandas. Taponaba bien el Sporting y así Charles y Moré, en las alas, poco recibían, al margen de lo que también estropeaban...
Nacho Cases y Omar trabajaban buscando la claridad en los ataques de los filiales del Sporting, pero también Vázquez aparecía atrás ordenando la última línea defensiva de los visitantes. Los minutos pasaban, 36, 37, 38... faltaban controlar, retener el balón más y mejor por parte del Pontevedra.
El irregular arbitraje no era garantía en lo que faltaba hasta el final. ¡No os confieis!, gritaba alguien desde el banquillo del Pontevedra. Alén, Omar.... el envío para Hugo López, pero otra vez corta bien una defensa del Pontevedra que esta vez envía rápido a la banda, donde controla Asier, se va arriba, aguantó lo suyo para el envío a Charles que esta vez sí, sostiene la presión de Oláiz, controla muy bien y acaba enviando a las mallas logrando por fin el gol de la tranquilidad, un 0-2 que ya parecía definitivo, a cinco minutos del final más lo que indicase la pizarra.
Busca ya el Pontevedra perder el tiempo, entra Yago por Iuri a la espera de que el reloj avance. En la reanudación tras el cambio, la grada se queda huérfana de seguidores locales y los rojiblancos parecen bajar los brazos... ya no hay peligros, el Pontevedra puede sobarla como quiera, ya no hay presión local. ¡Esto está listo...!, grita la voz inconfundible del speaker de Radio Pontevedra, Ramiro Espiño, desde el cajón en donde le han instalado para radiar el partido aquí en Mareo. Pero acto seguido, el radiofonista tiene que gritar gooooool, porque ese dominio del Pontevedra supone un balón en condiciones que llega a Xavi Moré en el banderín de córner, juega -nunca mejor dicho- con Pedro, se la deja a Charles para que se luzca y este, casi de chilena, hace el 0-3 que, ahora sí, va a resultar definitivo.
Triunfo justo del Pontevedra, que en el global fue superior. Pasó algunos apuros en la segunda parte, cuando el Sporting se fue arriba cuando el Pontevedra ganaba solo por 0-1, pero lo cierto es que los granates pudieron hacer más goles que el inicial que tuvieron. Fue un 0-3 que hacía justicia a las oportunidades que los del Pontevedra C.F. tuvieron en sus pies.
Consciente del empuje de los locales, Gay optó por meter a Bermudo hacia el 25 minuto del tramo final de partido; el Pontevedra buscó como agua de mayo sostener la ventaja. Por contra, a los 32 minutos, Abelardo optó por impulsar los cambios y meter a Javi López, otro tipo alto, para intentar el empate... Llegan los nervios para los granates : hasta el mal bote le juega una mala pasada a Jorge Rodriguez que corrige el mismo. Busca oxigenar el centro del campo Gay, mete a Danilson por Nené, que empezó bien el partido pero estaba ahogado ya...
Atrás aguantaba el Pontevedra, merced también al enorme oficio de Vázquez y Turiel -gran partido el suyo-. La proyección hacia el ataque era complicada en la salida por bandas. Taponaba bien el Sporting y así Charles y Moré, en las alas, poco recibían, al margen de lo que también estropeaban...
Nacho Cases y Omar trabajaban buscando la claridad en los ataques de los filiales del Sporting, pero también Vázquez aparecía atrás ordenando la última línea defensiva de los visitantes. Los minutos pasaban, 36, 37, 38... faltaban controlar, retener el balón más y mejor por parte del Pontevedra.
El irregular arbitraje no era garantía en lo que faltaba hasta el final. ¡No os confieis!, gritaba alguien desde el banquillo del Pontevedra. Alén, Omar.... el envío para Hugo López, pero otra vez corta bien una defensa del Pontevedra que esta vez envía rápido a la banda, donde controla Asier, se va arriba, aguantó lo suyo para el envío a Charles que esta vez sí, sostiene la presión de Oláiz, controla muy bien y acaba enviando a las mallas logrando por fin el gol de la tranquilidad, un 0-2 que ya parecía definitivo, a cinco minutos del final más lo que indicase la pizarra.
Busca ya el Pontevedra perder el tiempo, entra Yago por Iuri a la espera de que el reloj avance. En la reanudación tras el cambio, la grada se queda huérfana de seguidores locales y los rojiblancos parecen bajar los brazos... ya no hay peligros, el Pontevedra puede sobarla como quiera, ya no hay presión local. ¡Esto está listo...!, grita la voz inconfundible del speaker de Radio Pontevedra, Ramiro Espiño, desde el cajón en donde le han instalado para radiar el partido aquí en Mareo. Pero acto seguido, el radiofonista tiene que gritar gooooool, porque ese dominio del Pontevedra supone un balón en condiciones que llega a Xavi Moré en el banderín de córner, juega -nunca mejor dicho- con Pedro, se la deja a Charles para que se luzca y este, casi de chilena, hace el 0-3 que, ahora sí, va a resultar definitivo.
Triunfo justo del Pontevedra, que en el global fue superior. Pasó algunos apuros en la segunda parte, cuando el Sporting se fue arriba cuando el Pontevedra ganaba solo por 0-1, pero lo cierto es que los granates pudieron hacer más goles que el inicial que tuvieron. Fue un 0-3 que hacía justicia a las oportunidades que los del Pontevedra C.F. tuvieron en sus pies.
