08 marzo 2009

Ante el Huesca : otra derrota del Celta y ridículo en el cada vez más desierto Balaídos (0-1)

Cuando Jokin Esparza, el jugador que fue de Osasuna y que llegó en Navidad a Huesca, acertó a meter la pelota en el portal del Celta, parecía -por los gestos del goleador- que había ganado la Copa de Europa. Y es lo que sienten muchos de los equipos que acaban pescando en Balaídos : no se les pasa por la cabeza que el Celta haya podido caer deportivamente tan bajo. Nadie se lo explica. Sin duda no conocen a Mouriño y a los que le acompañan en tan nefasta gestión que de tres temporadas para aquí tiene a la entidad enterrada bajo los escombros de los despropósitos continuados. Como era de preveer, el problema no está abajo, sino en el piso de arriba... Claro que, a ver quien cesa al dueño; porque este no está por la labor de cesarse a si mismo... El caso es que a Balaídos, este sábado, fueron todavía menos que en el partido anterior. El récord del despropósito se bate una y otra vez. La señora aquella que arremetía contra los anteriores dirigentes para decir que con ella en el márketing iban más aficionados que cuando los Horacios pasaron triunfalmente por Segunda, es evidente que debería pensar que muy pronto tuvo que tragarse sus palabras. Nada o casi nada le sale bien a los Mouriños... ¿Por qué no se preguntan de una vez si el problema, realmente, no son ellos y deciden irse a casa y dejar el Celta en unas manos que a poco que hagan no lo van a hacer peor...?.

VIGO/PONTEVEDRA (MORRAZO-tribuna) .- Como advertía el comentarista de Radio Huesca al final del partido, la S.D. Huesca ha conseguido lo que no ha hecho en toda la temporada, encadenar dos victorias consecutivas. Lo ha hecho a costa del Celta. Y lo ha hecho superando su asignatura pendiente al ganar fuera de casa. Una victoria, por la mínima, pero que supone un salto de calidad, y anímico, fundamental para los azulgranas y que sume por contra el desastre a los celestes. El gol lo conseguía Esparza en el minuto 68.

Los azulgranas, tal vez con el planteamiento más defensivo de la temporada, ha conseguido la victoria ante un Celta que no ha demostrado nada sobre el terreno de juego, salvo algunos detalles en la primera parte que hacían alimentar ciertas esperanzas. Los de Antonio Calderón se han limitado a hacer su papel de equipo visitante, pero con algunas arrancadas peligrosas. El premio, al trabajo serio del Huesca, lo conseguía Esparza en el minuto 68 en una jugada que comenzaba Ripa en la banda izquierda y tras un pase de Rubén Castro remataba el jugador navarro.

Los últimos minutos del partido, tras el gol azulgrana, eran de un continuo asedio, por parte de los celestes, pero sin peligrosidad, a trompicones y para regocijo de los 30 seguidores aragoneses que en medio del sepulcral silencio se hicieron notar más de una vez en el estadio y en el sonido de la retransmisión televisiva. Balaídos es ya una caricatura de lo que antaño fue un estadio de glorias.

La S.D. Huesca, tras todos los contratiempos sufridos antes del partido, saltaba a Balaidos con un once inicial con jugadores no habituales (Rodri, Sorribas y Vegar) pero que han cumplido con creces su papel sobre el césped.
En estos momentos, a falta de 15 jornadas, el Huesca alcanza los 40 puntos y el Celta, claro está, se acerca cada vez más a las posiciones de descenso.

La a priori propuesta de Eusebio en su debut, mucho más atrevida que su predecesor, un 4-3-3 con todo el arsenal disponible sobre el terreno de juego ya de inicio, prometía mejores resultados pero la pólvora de los vigueses se demostró una jornada más muy mojada.

CELTA, 0 - HUESCA, 1
Celta: Notario; George Lucas, Rubén, Peña, Roberto Lago (Edu Moya, m.78); Michu, Rosada, Trashorras (Borja Oubiña, m.46); David Rodríguez (Maris, m.68), Dinei; y Ghilas.
Huesca: Eduardo; Robert, Borrego, Corona, Dorado; Sorriba, Vara (Esparza, m.63); Jonan García (José, m.75), Camacho, Rodri (Ripa, m.59); y Rubén
Gol: 0-1, m. 68: Esparza.
Árbitro: Perez Lima (colegio tinerfeño). Amonestó con tarjeta amarilla a y a los del Huesca Sorribas y Jonan.