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Mi-querido-Director :
El partido Madrid – Barcelona llenó buena parte de la tertulia que todos los lunes se forma en una cafetería del centro de Vigo.
Los aficionados del Madrid reconocían “la pasada” que el Barcelona les había dado, pero ya tenían la ilusión por la vuelta de Florentino a la Presidencia. Según ellos, el Madrid se va a llenar de “galácticos” y, en su consecuencia, la próxima temporada será suya.
Los aficionados del Barcelona entienden que la próxima temporada será lo que tenga que ser, pero, en ésta, sólo hay un equipo que borda el fútbol y ese es el Barcelona. Están preocupados con el partido del miércoles contra el Chelsea. No obstante, piensan que, como los ingleses se abran, Messí y compañía les pueden hacer un “roto”.
El empleado de Zona Franca comentó lo de “Vigo, quinta provincia” de Galicia. Según él, lo del nombre está muy bien, pero la realidad de la quinta provincia es que, en Vigo, se tengan los mismos servicios, organismos, juzgados, etc. que en las demás provincias. Y por supuesto que el AVE entre en Vigo.
El economista y auditor, “coñón” él, dijo que le daba una pena enorme Mouriño, D. Carlos, todavía Presidente del Celta. Tanto es as
que se pasó todo el fin de semana en ayunas. La pena que tiene, viene dada porque, según aparece en la Prensa, el pobre de Mouriño, D. Carlos, comentó a su círculo de amistades, que está cansado de “poner dinero todos los meses para el Celta” y, como consecuencia de ello, no se cobran las nóminas en el Celta en el tiempo adecuado. No se puede olvidar, siguió el “coñón” del economista y auditor, que Mouriño, D. Carlos, vino al Celta para engrandecer su historia con una gestión moderna y eficaz que haría que todos los ciudadanos de Vigo se engancharan a la gran causa del Celta que en él se encarnaba.
En aquellos días del gran advenimiento de D. Carlos, los medios de comunicación resaltaban que era poseedor de una gran fortuna en México, con avión privado y barco, contando, además, con gasolina suficiente para que anduvieran, pues también es propietario de varias gasolineras. Todo el mundo coincidía en que lo económico no iba a ser problema para el Celta. Se iban hacer grandes fichajes y por eso D. Carlos decía que el Celta iba a ganar la UEFA, la Copa del Rey, etc.. La abundancia había llegado con la familia Mouriño. El Celta iba a ser grande y poderoso. Además el coro de aduladores lo tenía bien atado, con el bozal puesto. Aquello de “ladran, luego cabalgamos”, no era para el Celta ya que nadie ladraba. La pena es que, ahora, tampoco nadie ladra, pero tampoco se cabalga.
Para la realización del proyecto colocó a su hija Marian como ariete de la modernidad; por eso, siempre anda con el ordenador al hombro, lanzando el proyecto de la dinamización de los ciudadanos a favor de la causa del Celta y, también por ello, a Balaídos van ahora poco más de tres mil personas.
En círculos próximos a Marian, se dice que, gracias a la modernidad que ella impregnó a la dinámica del Celta, los aficionados del Celta no van a Balaídos porque siguen los partidos del Celta por “internet”. Es lo “in”. Esto es ser un club moderno y lo demás son vulgaridades propias de unas estructuras caducas del fútbol. Al Celta, si eres moderno, has de verlo por “internet”. Según los mismos círculos próximos a Marian, directora comercial del Celta por obra y gracia de su padre, D. Carlos, lo de ver el fútbol por “internet” es una de las tesis que se estudia en la Universidad de Tampa, lugar donde la directora comercial de Celta profundizó en sus conocimientos.
Por tanto, el criticar que solamente asisten a Balaídos, para ver al Celta, tres mil personas... es propio de ignorantes ya que no están en la onda de lo moderno que es ver el fútbol por “internet” tal como lo impulsa Mouriño, D. Carlos, con su hija, directora comercial. ¡ Cuánto ignorante hay!, exclamó el economista. “Hay que estudiar en Tampa y venir de México para estar al día”, concluyó el economista que sacó a relucir el lado “coñon”.
El abogado del Puerto, al aire de lo que comentó el economista, apuntó que, en círculos próximos a la sede del Celta, se dice que es posible que Mouriño, D. Carlos, haya despedido a su hija ya que, desde hace tiempo, no volvió aparecer por las oficinas del Celta. Por lo que se ve, la tertulia fue de “coñas”. Pero con Mouriño, D. Carlos, nunca se sabe.
Sin embargo, el jubilado de Citroën no estaba para bromas y soltó una serie de improperios contra el jugador Rubén como consecuencia de unas declaraciones del mencionado jugador en las que decía que “hay que tener tranquilidad para encarar jornadas decisivas dentro del plan de mantener la categoría”. Según él, este jugador lo que tenía que hacer es “taparse”, entrenar y si juega intentar hacerlo lo mejor que sepa y pueda, esperando que haya suerte y juegue bien, cosa difícil.
El jubilado de Citröen filosofaba que para entender que el Celta esté, en su segunda temporada en 2ª, luchando por no descender... hay que ser muy moderno, ver el fútbol por “internet” y tener las ideas claras como las tiene la familia Mouriño y sus “mariachis”.
Ricardo Barros, Pedro Posada, Carmen Avendaño... son la modernidad andante y por eso entienden las ideas profundas de la familia Mouriño sobre el Celta. Los demás somos un atajo de ignorantes que no nos merecemos el sacrificio que la familia Mouriño está haciendo para que el juguete, que compraron para que su hija se entretuviera , siga vivo.
Sin que se sepa por qué..., instalado en la euforia y tal vez enardecido, con una carga de mala “uva”, el jubilado de Citröen gritó: ¡Viva Pancho Villa!. Y respiró porque casi se ahoga con tanta emoción.
Director, noticia de última hora. Al parecer, la familia Mouriño sigue con su idea de exterminar el pasado del Celta.
Un día tiraron a la basura todo el material que había archivado de la Dirección Deportiva. Otro día, del Museo, retiraron el traje de peregrino que el anterior Presidente había llevado cuando hizo el camino de Santiago y ahora, está a punto de consumarse el cierre del Museo. Si esto se produce, es evidente que se confirmaría que la familia Mouriño no tendría categoría, ni señorío para dirigir el Celta.
Mi pregunta, Sr. Director, ante estas ruindades es la siguiente: ¿Es tan fuerte el odio que no se puede alejar ni pensando en el vacío que produce la muerte?.
Saludos
Manuel Galocha. 4-5-2009