VIGO (MORRAZO-tribuna).-No hay más que leer para ver que la situación negativa del Celta de Mouriño es tremenda. Digna de que salga corriendo y abandone una propiedad que deportivamente ha hundido de modo escandaloso...
"La relación del Celta con Balaídos es un amor imposible de un tiempo a esta parte. El coliseo vigués ha dejado de ser el acogedor y plácido hogar donde el conjunto vigués obtenía sus mayores gestas deportivas. Es más, ahora mismo le supone un tormento disputar un partido oficial sobre esta pradera del Val do Fragoso. Las estadísticas indican que el equipo celeste no saldrá victorioso en tres de cada cuatro partidos que allí celebre. Y todo esto ocurre cuando está a punto de cumplirse el octogésimo aniversario de la inauguración oficial del estadio vigués. De los últimos cuarenta y dos partidos celebrados en Balaídos de competición oficial -de las dos anteriores campañas y un par de ellos de la actual-, la escuadra céltica solamente ha ganado once; es decir, casi uno de cada cuatro.Estos pésimos resultados han conducido directamente al equipo del sexto puesto en Primera a cerrar la clasificación de Segunda. Todo ha sucedido en un intervalo de dos años, coincidiendo con el traspaso de poderes en el consejo de administración de Horacio Gómez a Carlos Mouriño..." (Lean más pulsando sobre esta línea...)
"La relación del Celta con Balaídos es un amor imposible de un tiempo a esta parte. El coliseo vigués ha dejado de ser el acogedor y plácido hogar donde el conjunto vigués obtenía sus mayores gestas deportivas. Es más, ahora mismo le supone un tormento disputar un partido oficial sobre esta pradera del Val do Fragoso. Las estadísticas indican que el equipo celeste no saldrá victorioso en tres de cada cuatro partidos que allí celebre. Y todo esto ocurre cuando está a punto de cumplirse el octogésimo aniversario de la inauguración oficial del estadio vigués. De los últimos cuarenta y dos partidos celebrados en Balaídos de competición oficial -de las dos anteriores campañas y un par de ellos de la actual-, la escuadra céltica solamente ha ganado once; es decir, casi uno de cada cuatro.Estos pésimos resultados han conducido directamente al equipo del sexto puesto en Primera a cerrar la clasificación de Segunda. Todo ha sucedido en un intervalo de dos años, coincidiendo con el traspaso de poderes en el consejo de administración de Horacio Gómez a Carlos Mouriño..." (Lean más pulsando sobre esta línea...)
